La Vicerrectoría de la Universidad de Guadalajara llevó a cabo la edición catorce del Encuentro de Humanistas, en el marco de la Feria Internacional del Libro, bajo el tema "Populismo y xenofobia: Los nuevos falsos nacionalismos".

El Encuentro estuvo bajo la conducción de José Luis Santana Medina, Rector del Centro Universitario de los Valles (CUValles), y contó la participación de los especialistas Ángel Díaz Barriga, experto en educación superior; Jorge Alonso Sánchez, antropólogo e investigador emérito; y Jorge Durand Arp-Nisen, especialista en migración.

De acuerdo a Santana Medina, el Encuentro tuvo por objeto el análisis de los recientes movimientos de países como Inglaterra, Estado Unidos y Francia, donde la oposición a la migración y el resurgimiento de movimientos como el neonazismo y la xenofobia han atraído nuevamente las miradas del entorno mundial.

Amenaza norteamericana

Dentro del evento, Jorge Durand señalaría que la llegada de Donald Trump a la presidencia de los Estados Unidos, forma parte de un proceso de más de veinte años en la construcción ideológica, política, electoral y legal de la visión del migrante como amenaza al estadounidense, “es una amenaza económica, es una carga para la sociedad, amenaza a la identidad del pueblo norteamericano y su seguridad personal”, señaló el investigador.

El investigador resaltó que desde el surgimiento de la Ley 187, cada periodo presidencial norteamericano ha marcado un tratamiento criminal hacia el migrante, siempre disfrazado de legalidad.

Nacionalismo irracional

Por su parte Ángel Díaz Barriga realizó una crítica al papel de la educación en la construcción del nacionalismo mexicano, tras analizar cómo ha sido el desarrollo de la identidad nacional desde el nivel básico, “la función que le asigna el Estado Mexicano a la educación primaria después de la revolución, en la primera etapa es alfabetizar regiones campesinas y después el conformar la identidad nacional”.

En este sentido, el experto en educación considera que la formación del nacionalismo está en manos de profesores normalistas formados bajo un esquema de inicios del siglo XX, que contrasta con los nuevos planteamientos de globalización, “el profesor responde a un perfil revolucionario y no a un perfil global” reconoció.

Lo anterior recae en la formación de ciudadanos con un sentido nacionalista sin argumentos fuera de los proporcionados por el Estado, incapaz de establecer diálogos, lo que cataloga como un nacionalismo irracional.

Opresores y oprimidos

En tanto Jorge Alonso Sánchez, analizó el papel de los “nacionalismos” como herramientas de manipulación de los pueblos, al distinguir dos tipos de nacionalismos, uno de opresores y otro de oprimidos.

De igual manera habló sobre los peligros del populismo, ya sea como “defensa de los de arriba” o como estrategia de manipulación, “la crítica al populismo es la defensa de los de arriba contra medidas que favorecen a los de abajo, pues no habría que caer en esa trampa. Si populismo es que líderes de cualquier tendencia manipulen a los de abajo, entonces es algo indeseable”, comentó.

Texto: Luis Alberto Ávila 

Imágenes: Noé Darío Mora Medina